Aunque no se haga caso de las
palabras, ellas quedarán en documentos para la historia. La nota enviada por el
Gobierno de la República española al Comité de No Intervención, es un documento
que retrata magníficamente, en todas sus fases, el aspecto de la lucha de los
extranjeros contra el pueblo español. Las partes que se han dado a conocer al
público, son dignas de que sean aireadas por todos los ámbitos, para que al
pasar por las conciencias, puedan dejar en ellas, si es que están latentes, sus
afirmaciones impregnadas de verdad. Esa nota dice:
"El Gobierno de España mantiene su derecho completo como
Estado soberano a proporcionarse armas y municiones donde quiera y como quiera
que pueda". ¿Puede destruirse de alguna forma este derecho? ¿No es Un
Gobierno legítimo, reconocido por esos mismos países que han pretendido
estrangularlo, negándole medios de defensa? Prosigue diciendo la nota: "La
guerra civil hubiese terminado ya hace meses a no ser por la política equivocada
y suicida de No Intervención, observada solo por las potencias democráticas de
Europa y sistemáticamente ignorada por los Estados totalitarios"
¿Puede nadie negar esa afirmación del Gobierno de la República
española? ¿No se ha comprobado, a través de todos los actos que los firmantes
del convenio de No Intervención de regímenes totalitarios no hicieron el menor
caso de él? La nota prosigue: ''Esa política, niega a la democracia española
los medios para defenderse contra la acción de un puñado de traidores de su
propio país, combinados con ciertas potencias que están interesadas en España
como base útil para sus proyectos políticos y bélicos". Esto solamente lo
dudan aquellos países que quieren aparentar que lo dudan, en el fondo están tan
convencidos de ello que si vacilan, es por otras razones, no por la duda.
Cuando quieran reaccionar, será tarde. Y las consecuencias, inevitables.
La nota sigue diciendo: "El Gobierno de la República
española, denuncia ante la conciencia del mundo la monstruosidad legal y moral
de pretender que se pueda colocar confianza alguna en que ciertas potencias
cumplan honorablemente su papel como controladoras del convenio do No
Intervención. Nos referimos a esas potencias que desde el principio de la
rebelión militar han prestado ayuda armada los rebeldes. Una de ellas por lo
menos, Italia, tiene en la actualidad unidades del ejército combatiendo en
territorio español contra el Gobierno legítimo de España, en violación
flagrante de todas las normas del derecho internacional. Las flotas de guerra
de esos países, han sido puestas al servicio de los rebeldes y ahora van a ser
incluidas en un sistema de observación naval para que puedan así mejor ayudar a
los rebeldes, en su posición de controladores, posición oficial desde la cual podrán
continuar con mayor impunidad sus actividades de espionaje y agresión a las
costas españolas.
El Gobierno de la República, llama la atención sobre sus notas del
8 de Enero, hablando de la dilación en adoptar ese acuerdo, dilación que
permitió a los rebeldes creer que ya tenían suficientes medios para vencer, y
entonces, las potencias que los amparan, aceptaron el control. Habla también de
su reciente nota al Comité y a la Sociedad de las Naciones enviando las pruebas
y denunciando a Italia, a tenor del Art. X de la Sociedad de las Naciones por
haber agredido a España, enviando a ella ejércitos regulares sin previa
declaración de guerra. "Solo después de que embarques repetidos de
contingentes de alemanes e italianos habían proporcionado ya a los rebeldes un verdadero ejército
invasor que corresponde en dimensiones y cantidad de material de guerra a los
requisitos del Estado Mayor rebelde, aceptaron el control". Estas son las
razones de la República. ¿Serán atendidas?
Facetas de la actualidad española, La Habana, abril 1937
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