María Torres / 26 Mayo 2014
A las doce y media de la mañana del 26 de mayo de 1939, casi seis mil soldados alemanes bajo el mando del general Von Richthofen, (primo del legendario Barón Rojo), junto con una delegación de generales españoles presidida por Queipo de Llano embarcaron en el Puerto de Vigo rumbo a Alemania. Cinco trasatlánticos de la organización alemana "La Fuerza de la Alegría" (un programa de vacaciones nacionalsocialista) eran los encargados de llevarles hasta el Puerto de Hamburgo, donde serían recibidos apoteósicamente por el Mariscal Goering. Los periódicos de la época se deshacían en elogios con los alemanes, al igual que con los trasatlánticos que habían llegado a la Ría, entre los que destaca el Wilhelm Gustloff, que se hundiría en 1945 dejando más de diez mil muertos, incorporando la embarcación a la historia de la mayor tragedia marítima.
A las doce y media de la mañana del 26 de mayo de 1939, casi seis mil soldados alemanes bajo el mando del general Von Richthofen, (primo del legendario Barón Rojo), junto con una delegación de generales españoles presidida por Queipo de Llano embarcaron en el Puerto de Vigo rumbo a Alemania. Cinco trasatlánticos de la organización alemana "La Fuerza de la Alegría" (un programa de vacaciones nacionalsocialista) eran los encargados de llevarles hasta el Puerto de Hamburgo, donde serían recibidos apoteósicamente por el Mariscal Goering. Los periódicos de la época se deshacían en elogios con los alemanes, al igual que con los trasatlánticos que habían llegado a la Ría, entre los que destaca el Wilhelm Gustloff, que se hundiría en 1945 dejando más de diez mil muertos, incorporando la embarcación a la historia de la mayor tragedia marítima.
Los miembros de la Legión Cóndor, nombre con que se bautizó a la fuerza de intervención alemana que ayudó a Franco en la Guerra, integrada mayoritariamente por aviones y pilotos de la Luftwaffe -aunque más tarde se incorporaron a su filas soldados de la Wehrmacht- llegaron a Vigo el 23 de mayo de 1939. Un día antes habían participado en León en el homenaje que les ofreció el caudilloporlagraciadedios.
El 24 de mayo desfilaron marcialmente por la ciudad, concretamente por García Barbón y Urzáiz. Los vigueses no tuvieron más remedio que echarse a la calle para ver a estos "valientes y arios soldados", pues así lo había requerido el bando del Alcalde Luis Suárez-Llanos Menacho, manifestando que estaban obligados a expresar la gratitud de España a la "noble nación alemana". "Los vigueses que tienen el honor de poder testimoniar por última vez la gratitud de España a la noble nación alemana, acudirán todos a despedirlos" También desde el propio "Faro de Vigo" se animaba a una participación masiva de la ciudadanía para "sumarse a las vibraciones de entusiasmo jubiloso que atraviesan en estos días las campiñas y las montañas gallegas"
El alcalde vigués envió «afectuosos y fraternales saludos de Vigo a Alemania y a su Caudillo Hitler» y ofreció una brillante recepción a Von Richtoffen, que agradecido le hizo entrega para la ciudad de Vigo de un retrato de Adolf Hitler. Se desconoce el paradero del retrato del dictador alemán. No existe documentación en el Ayuntamiento que avale que el cuadro pasó por sus dependencias.
Los "héroes de Guernika" que habían permanecido en España desde el 5 de agosto de 1936, combatiendo junto al ejército de Franco en su guerra contra el legítimo gobierno republicano, y regresaban por fin a casa, fueron despedidos en Vigo en loor de multitudes como lo demuestra el reportaje gráfico firmado por el fotógrafo local Pacheco y por el fotógrafo del Führer, Hugo Jaeger. No importaba si habían violado sistemáticamente las leyes internacionales para tiempos de Guerra fijadas en la Convención de la Haya de 1899 y ampliada en 1927, vigente en España en los años 1938 y 1939, que prohibía "el bombardeo aéreo con motivo de aterrorizar la población civil, así como también la destrucción de sus propiedades y la agresión a los no combatientes". También debían desconocer que "En caso de que los objetivos especificados estén situados de manera que sea imposible diferenciar la población civil de la instalación militar, el avión se abstendrá de bombardear". (Artículo 24, La Haya, 1927).
Atrás, olvidadas ya por estos "valientes y arios soldados", quedaban miles de víctimas civiles inocentes que empaparon con su sangre todo el territorio de una tierra que quedó herida para siempre.
Pero a Vigo aún le quedaban unos años para despedirse definitivamente de los nazis y de la tela de araña que tejieron en la ciudad que sería el escenario de la lucha por el wolframio junto al resto de Galicia, del espionaje alemán y el contraespionaje aliado. Además, su puerto albergó a los submarinos U-Boot y Abwher, teniendo también un papel destacado en la operación Der spinner, para facilitar la huída de criminales de guerra hacia América del Sur como Walter Kutschmann.
Esa primera imagen de la legión condor no es Vigo, es León.
ResponderEliminarGracias Tatiana. Procemos a cambiar la imagen.
EliminarCorrecto, en concreto es la esquina de la C/Ancha, con la C/Varillas, denominada en su día de "La Legión Cóndor". Se adivina claramente el rótulo de "Pensión La Astorgana".
ResponderEliminarGracias Nicolás. Vamos a corregir el error.
Eliminardesde vigo hasta buenos aires. nazis en argentina!!
ResponderEliminarsalutt
Tanto el régimen de Franco como el de Salazar se les facilitó su paso hasta América del Sur.
EliminarEn españa se refugiaron muchos Nazis terminada la Guerra Alemana, como en Montevideo el Doctor Menguele,criminal que experimento con niños,
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