No es broma a pesar de ser el día
de los "inocentes".
Ya veis como se las gastaban estos del
glorioso movimiento nacional. Los hijos no eran de los padres, si no de la
patria y debían llamarse como el caudillo por la graciadedios le pareciera
adecuado. Nada de apelativos de tendencia rara. Nada de marcado
significado separatista, ni que mostrara la más mínima desafección a su
glorioso movimiento (¡ni que fuera el de Beethoven!)
Lo sorprendente es que el suceso acabara
en una multa y no en un tiro de gracia. Eso si, por la graciadedios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario