Lo Último

724. En memoria de Pepe Miranda Lara

La madrugada del 7 de Agosto de 1936 mi abuelo Pepe Miranda Lara fue asesinado frente a las tapias del Cementerio de Granada. Tenía 40 años, era empresario de profesión y político de vocación.

Era el secretario general de la Agrupación Socialista de Padul y había formado parte como Concejal de la  Corporación Municipal en la que su padre era el Alcalde.

Fue miembro fundador de la Sociedad Obrera “La Alianza” cuyo principal objetivo era proteger a los trabajadores de los abusos de los propietarios asociados en el Centro Agrario, y fomentar la educación y el progreso social y económico de ellos y sus hijos.

Leer hoy los Estatutos de esta Sociedad, es una lección de respeto, solidaridad, democracia y lealtad a la República y a las instituciones.

Fue el artífice de la creación de un cuerpo de guardias municipales para vigilancia de los campos y protección de la población.

Cuando los militares dieron el golpe de estado contra la República, algunos de sus compañeros se marcharon pero el no quiso hacerlo por no dejar desamparada a su familia. Su argumento era “si no he hecho nada,¿por qué me voy a ir”? recordaba mi abuela muchos años después.

Al conocerse su asesinato la Guardia Civil apostó a una pareja de guardias en la puerta de su domicilio para impedir a su familia que le pudieran llorarle acompañados de familiares y amigos.

A mi abuela le dejo 5 niños y una pena negra que le duró toda su vida, pero que no le impidió pasar de una vida muy cómoda a otra de miedo y dificultades en la que cada día tenía que buscarse la vida para sacar adelante a sus hijos (les habían confiscado hasta la maquina de escribir de mi abuelo) ¡¡Y vaya que lo hizo!!, los convirtió en personas integras, trabajadoras, generosas y honestas, incapaces de sentir odio o rencor hacia nadie.

Mi bisabuelo, también llamado Pepe Miranda, siete días después del fusilamiento de mi abuelo, dejó un estremecedor escrito en el que relata la detención y encarcelamiento de su hijo, las personas que lo sacaron de la cama a las dos de la mañana y de las noticias que le llegaron de su asesinato. Y dejó el escrito para que, según sus palabras “los mas curiosos de la familia tuviera conocimiento de estos hechos, y mantuvieran siempre viva la memoria”.

Lo que no podía imaginar mi bisabuelo era que apenas cuatro meses después (Navidad de 1936) él mismo, con tres mujeres de la familia, una de ellas su nuera maestra de Salar desde hacía 26 años, serían asesinados en las tapias del cementerio de Loja, tras unos hechos terribles, que la familia seguimos sin conocer en su totalidad.

Mi deseo era recuperar los restos de mi abuelo para que reposaran junto a mi abuela por toda la eternidad, pero algo tan sencillo como querer enterrar a tus muertos al parecer no es posible en esta ciudad. En Granada no fue suficiente asesinar a las personas leales a la República, quisieron además borrar cualquier rastro de su existencia, y los restos de muchos fusilados fueron quemados, arrojados a fosas de difícil localización o se construyó sobre las fosas donde les habían enterrado. Aún así, sólo consiguieron hacerles desaparecer, pero lo que no consiguieron entonces, ni van a conseguir jamás, será borrar su memoria.

Este es mi pequeño homenaje en memoria de los míos y de todos los que le acompañaron, en el día que se cumplen 77 años del asesinato de un hombre que dedicó toda su vida a luchar por un mundo mejor, mas justo, libre e igualitario, en el que todas las personas tuvieran los mismos  derechos e idénticas oportunidades.

¡¡¡VERDAD, JUSTICIA Y REPARACION !!!

Pepa Miranda









2 comentarios:

  1. Sólo los cobardes y los ladrones van denoche a arrebatar lo que no es suyo. Triste historia la nuestra, demasiado dolor gratuito. Mucho miedo tenían estos fascistas para asesinar a tanta gente honrada y democrática. ..pensar que seguimos teniendo en el poder a sus herederos me da náuseas

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Como no podía ser de otro.modo, LOS REPRESORES torturadores hostigadores terroristas ASESINOS del tricornio implicados hasta el cuello.

      Atajo de criminales uniformados ...

      Eliminar