Después de la derrota momentánea de Octubre, había que
reagrupar las fuerzas para emprender la lucha bajo las nuevas condiciones de
terror, de ilegalidad, de atropellos sin nombre; había que ampliar el frente de
combate, sin el cual no se habría conseguido contener, paulatinamente, la obra
nefasta del gobierno del bienio negro, romper el bloque reaccionario y conducir
a las masas al triunfo del 16 de febrero. A una nueva situación,
corresponden una nueva táctica y nuevos métodos de lucha para poder compenetrarse
con las amplias masas y seguir luchando, aun bajo las condiciones más
difíciles; no permanecer nunca pasivos: ésa es la táctica leninista, y si se la
sabe aplicar, el triunfo no puede hacerse esperar.
Algunos creían, o pretendían hacer creer, que el
Frente Popular era una alianza sin principios con las fuerzas de la burguesía
izquierdista y de la pequeña burguesía.
Otros se planteaban el problema de si sacrificábamos
los objetivos finales por dar solución a las necesidades inmediatas, pero unos
y otros se han equivocado. El Frente Popular es la expresión viva de la
concentración de las fuerzas obreras y democráticas de España frente a la otra
concentración: la de la España del pasado.
En esta gran polarización de fuerzas que se está
operando en nuestro país, el proletariado tiene lamisión de colocarse
inteligentemente en el camino del cumplimiento de su misión histórica. Y hay
que saber comprender que la lucha de clases no marcha siempre por un camino
recto, ni el problema está en desertar del logro de las conquistas parciales
que puedan beneficiar a las masas, contraponiendo a esto, como escudo engañoso,
la “pureza revolucionaria”, el principio catastrófico del “todo o nada”. ¡No!
Las reivindicaciones parciales, cuando se tienen perspectivas revolucionarias
claras, sirven como escalones ascendentes en la senda del triunfo sobre los
explotadores. Nuestra diferencia, con los reformistas estriba, justamente, en
esto: en que mientras nosotros utilizamos las reivindicaciones parciales para
hacer marchar a las masas por el camino de la revolución, ellos pretenden
utilizadas para desviarlas de ese camino.
La lucha, hoy, está entablada a fondo entre la
democracia en el terreno económico y político, de un lado, y de otro, las
castas semifeudales, los privilegios de la Iglesia, las oligarquías
financieras, la reacción y el fascismo, con su secuela de hambre y de miseria,
de terror y de guerra. Sin despejar el camino de estas fuerzas negras del
pasado, sin liquidar su base económica y social, no podremos organizar las
luchasulteriores, encaminadas a la emancipación total de los oprimidos.
La experiencia del 16 de febrero debe, por tanto, a
servirnos para examinar cómo los obreros y campesinos deben marchar para que
este triunfo del pueblo se amplíe y a la par se consolide. En primer lugar,
debemos sacar una conclusión: si las fuerzas más consecuentes, que sirven de
motor a la revolución, son los obreros y los campesinos, la tarea es unir a
estas fuerzas en un frente de hierro, con las Alianzas Obreras y Campesinas,
para que ellas refuercen, alienten y dirijan al resto de las capas progresivas
encuadradas en el Frente Popular, impidiendo la ruptura de los Bloques
Populares. Pues éstos no sólo han conseguido la victoria del 16 de febrero,
sino que pueden aún ganar nuevas batallas, ya que tienen una gran cantidad de
intereses comunes y un enemigo común que se opone a su realización. Romper el
Bloque, sería tanto como entregar a nuestros aliados en brazos de la gran
burguesía y de los terratenientes, que ya están queriendo seducirlos con sus
cantos de sirena. De aquí que nuestro partido lucha por mantener el Bloque
Popular y apoyar al Gobierno republicano de izquierdas para que realicen el
pacto del Frente Popular. Criticando, sí, lo que no marcha y empujando a su realización,
pero dándole apoyo y soluciones para realizar las tareas que le están
encomendadas, para impulsar y desarrollar la revolución democrática.
El camino del 16 de febrero, el camino del Frente
Popular, significa la derrota de las viejas castas feudales, de las oligarquías
financieras, significa abrir amplios cauces a la democracia y luchar con
nuestros aliados sinceramente antifeudales y antifascistas para cumplir las
tareas de la revolución democrático-burguesa».
José Díaz,
Mundo Obrero, 1 de mayo de 1936
Este comentario publicado en Mundo Obrero por José Díaz el 1º de Mayo de 1936 y tras el triunfo del "Frente Popular", en las Elecciones Generales del 16 de febrero de 1936, parece ser calcado con la situación que se vive en estos momentos y si nos trasladamos a antes de las Generales del 20D´15, que en lugar de aglutinar escasas fuerzas de Izquierdas, hubiéramos hecho una gran Conferencia con el fin único de restaurar el "Frente Popular" y dar mayor protagonismo al Pueblo, ya verían los dirigentes de los mal llamados Partidos Políticos de Izquierda lo que hubiera cambiado esta situación, que hoy se vive en este País. José Díaz, ya tenía una visión verdadera aún con sus temores. Este articulo lo hemos de poner encima de las mesas de las Clases Populares, que no es la derecha, sino que pasa por obligación por la clases deprimidas, los obreros sin trabajo, la Educación, la Sanidad, la Pobreza y todo lo que nos ocurre a la mayoría de los Ciudadanos de Este país. Yo abogo a que haya mentes lúcidas para que se organice a toda la Sociedad y a sus Ciudadanos en esta Conferencia por un Nuevo "Frente Popular", porque tuvo que tener un fuerza muy grande y espectacular porque por ese "Frente Popular", la derecha fascista se levantó contra La IIª REPÚBLICA y nos hizo una guerra apoyados por el fascismo de Mussolini y los Nazis de Hitler y fusiló a todo aquello que sonara a "FRENTE POPULAR", a ROJOS, a IZQUIERDA, a PROGRESISTAS, a EDUCACIÓN LAICA, a SANIDAD PÚBLICA Y UNIVERSAL, a UNA VIVIENDA DIGNA y otras formas de trasladarnos a nuestros días y reivindicar una forma común de hacer política, no de solamente luchar los cabezas de los cuatro partidos de la cabeza política de este nuestro territorio republicanos. ¡¡¡ NO !!!!. Si se avecina unas nuevas Elecciones Generales, tenemos que exigir una mayor responsabilidad a los Partidos de Izquierdas y ser sensatos a la hora de pedir el Voto al Ciudadano. Me gustaría que de alguna manera, toda la ciudadanía que sufre con un salario mínimo de pobreza, que somos mayoría, nos pudiéramos juntar en esa Conferencia sin siglas ni cabezas de partidos y aunque sea un guirigay, salgamos con una idea clara de la refundación del "FRENTE POPULAR" de Izquierdas y Republicano.
ResponderEliminarAsí es José Luis. Podríamos haber aprendido pero ...
Eliminar