Hace un año que Madrid defendía en la cumbre de los heroísmos
supremos la independencia de toda nuestra patria, agredida por ejércitos
extranjeros y traidores indígenas, estrellando contra sus muros infranqueables
las fuerzas de invasión.
Al contemplar este Madrid de hoy, con sus trincheras, con sus
soldados de hierro, forjados en combates gloriosos como los de Guadalajara.
Jarama y Brunete; con su vida normal bajo el fuego de los obuses, con su
alegría permanente; con su valor impresionante, nuestra fe en la victoria, la
confianza absoluta en los destinos de la libertad, de paz y de progreso porque
luchan las armas se robustece y se afianza.
Madrid, que el 7 de Noviembre de 1936 fue el ejemplo más alto de
la conciencia progresiva de la España republicana, fue el freno tajante de la
ocupación extranjera, es hoy el aliento más poderoso, la garantía suprema de
que la victoria sólo será de la República.
Jesús Hernández (Ministro de Instrucción Pública)
Facetas de la actualidad española núm. 9
La Habana, enero de 1938
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